Patrimonio
es un elemento heredado. Es un regalo del pasado para la sociedad del presente,
encargada de valorarlo, aprovecharlo y conservarlo para las generaciones
futuras. El arquitecto es el responsable de velar por el patrimonio
arquitectónico, debiendo conocer por ello el pasado de cada lugar, su
importancia, lo que aportó a la sociedad del momento e intentar extraer lo
esencial del proyecto de aquella época. Es entonces cuando debe reescribir una
historia, respetando el guión original pero adaptándola a la época actual, para
que todos puedan entender el valor de ese lugar, visitarlo y sentir que forman
parte de la intervención. Si esto ocurre, el arquitecto ha cumplido su misión
de retomar una historia pasada y convertirla en una actual sin utilizar una
sola palabra. Ésta es, seguramente, la tarea más intelectual, cuidada y
racional que realizará el profesional durante su carrera.
Grupo 1
Lucía Andrade Gulías
Teresa Benítez Rubio
Álvaro Santos Alonso
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